La erliquiosis canina es una enfermedad de perros y humanos causada por una bacteria del género Rickettsia llamada Ehrlichia canis. Se transmite por picadura de garrapatas. La mejor forma de prevenir la enfermedad es evitando los parásitos. Produce anemia, además de afectar a la médula ósea y al sistema inmunitario de los perros.
Signos y Síntomas
Cambios de comportamiento y ánimo.
Letargo y falta de coordinación.
Pérdida de peso por falta de apetito.
Hemorragias y convulsiones espontáneas.
Inflamación de las articulaciones, cerebro o ganglios.
Problemas respiratorios.
Uveítis.
Mucosas pálidas.
Fiebre.
Epistaxis.
Diagnóstico
Se diagnóstica con un test realizado a una prueba de sangre. A la muestra de sangre se le puede aplicar tanto un hemograma como una prueba serológica para detectar la erliquiosis. Tendrá que estar en tratamiento hasta que este fuera de peligro.
Tratamiento
La erliquiosis puede llegar a ser fatal si no se trata de manera inmediata, y con seriedad, si tiene cura la cual se trata mediante antibióticos. Tras el tratamiento se deben repetir las pruebas de diagnóstico para cerciorarse de que la enfermedad ha desaparecido.